Home Expert Team ¿Le estás cargando la mano a tus hijos? ¡No abuses!

¿Le estás cargando la mano a tus hijos? ¡No abuses!

Doctora Descanso

En este Día del Niño no todo es risa y diversión, porque hay que poner sobre la mesa un tema incómodo pero importante, y es que hay papás que se pasan de exigentes, tanto que pueden orillar a sus chamacos a conductas autodestructivas.

Me refiero a esos que quieren que sus hijos saquen puro 10, ganen todos los concursos, y en el peor de los casos, quieren que se comporten como adultos.

Por eso invité a mi amiga, la psicóloga Alicia Domínguez de Pedro, la Doctora Descanso, para conocer lo fatal que la están pasando esos pequeñitos por no cumplir con las expectativas de sus padres.

Basta con ver la vida de muchos niños famosos, que parecen brillar en la tele, en redes o en los escenarios, pero la realidad es que por dentro están rotos por la presión de sus papás.

A muchos chamacos les roban su infancia en nombre del “éxito”, y es que lo que empieza como “solo quiero que le vaya bien” termina en exigencias absurdas tipo: “un 9 no es suficiente, debes sacar puro 10”, “si vas a hacer algo, hazlo perfecto”, “tú puedes con todo”. Spoiler: no pueden con todo, ¡porque son niños!

El deber de los adultos no es exprimirlos, sino acompañarlos. La Doctora Descanso me explica que este nivel de perfeccionismo genera ansiedad, frustración y una constante sensación de “no soy suficiente”.

Esta situación también puede detonar una autoestima bajísima, trastornos alimenticios, Trastorno Obsesivo Compulsivo e incluso adicciones. Todo por exigirles más de lo que pueden dar o por tratar de cumplir sueños que se quedaron en el tintero a través de ellos.

Por eso vemos al papá o la mamá con el hijo en castings, talleres o en competencias. Ojo: no está mal impulsar, pero hay una línea bien delgadita entre motivar y controlar.

Así que si tú eres de los que se estresa porque su chamaco no ganó el concurso o porque no quiso participar en el festival de la escuela, hazte la siguiente pregunta: ¿esto lo está haciendo por él o por mi? ¿Esto lo hace realmente feliz o lo hace para tener mi aprobación y hacerme sentir orgulloso?

Ser papá o mamá no es un proyecto de perfección. Es una guía amorosa, una escucha constante, una forma de enseñar que equivocarse también es parte de crecer.

Si no has sanado tus heridas, no uses a tu hijo para taparlas, y mejor dale play a nuestro podcast donde la Doctora Descanso nos da algunas herramientas para aprender a darle la vuelta a la tortilla, o entra al sitio web de Colchones Carreiro para más información.

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